Al menos 48 muertos y 26 desaparecidos, un puerto destruido, familias en barrios populares con hambre y comunidades sin cosechas. El comportamiento y las consecuencias del huracán Otis, que impacto el 25 de octubre en Acapulco, Guerrero, es una alerta roja en el tema de justicia climática.
El paso de Otis también afectó a las 47 comunidades de los bienes comunales de Cacahuatepec, que siguen organizandose contra el proyecto de presa La Parota y para el cuidado del río Papagayo, en la zona rural de Acapulco. “El 70 por ciento de la cosecha se perdió. No habrá maíz en este año. La cosa ya venía mal desde mayo, sobre todo, en agosto y septiembre que no cayó ni una gota de agua. Ahora los fuertes vientos vinieron a dar el tiro de gracia. La mazorca que le entró el agua se va a podrir. De las 37 mil hectáreas de tierra, unas 20 mil, son de cultivo de maíz y la mayoría de ellas quedaron inservibles”, reporta el Tlachinollan.
Otis, alimentado por la presencia de aguas oceánicas más cálidas de lo normal (de alrededor de 31 °C cuando usualmente se ubican en torno a los 28 °C) logró pasar de una tormenta tropical a un huracán de categoría 5 en menos de 12 horas. “El daño causado por el huracán Otis en Acapulco debe analizarse a la luz de dos dimensiones, la primera toma en cuenta las características del huracán, la segunda se enfoca en la capacidad de prevenir desastres similares”, afirma la Red Mexicana de Científicos(as) por el Clima – REDCiC.
Los expertos de la REDCiC critican que el Sistema Nacional de Protección Civil, cuyo marco operativo data del 1986, tiene un enfoque predominantemente reactivo y muy poca atención a la prevención de desastres. Hasta 2021, 94% de los recursos se destinaron a la atención de los desastres y únicamente 6% a prevenirlos, por lo que consideran “fundamental que México cambie su esquema reactivo por un enfoque preventivo de los desastres, en particular tomando en cuenta los impactos observados y los riesgos proyectados del cambio climático”.
Esta semana se realiza el Foro Híbrido “La crisis del hábitat y el cambio climático: de las respuestas locales al debate internacional“, organizado por Habitat International Coalition – América Latina / HIC-AL y Cooperación Comunitaria, organizaciones que entregan las primeras 10 toneladas de maíz recaudadas para las comunidades rurales de Cacahuatepec, Acapulco. Aún puedes seguir ayudando a través de la recaudación de estas organizaciones solidarias.
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