El antropólogo Benjamín Maldonado Alvarado (FES Aragón, UNAM) afirma en su artículo “Usos y Costumbres: de la visibilización a la expansión de la comunalidad” para El Topil 41 que “luego de 25 años de avanzar en el ejercicio de derechos para la vida comunal, es necesario extender esos derechos y su ejercicio”. En un balance de estos 25 años de ejercicio comunal del poder mediante su reconocimiento como usos y costumbres, “destaca la importancia de la asamblea como la mejor forma de representación legítima del conjunto de familias que constituye la comunidad”. En la opinión de Maldonado, el fortalecimiento de la vida comunal “pasa de los usos y costumbres locales a la construcción de usos y costumbres regionales, que agrupen libremente a va-rios municipios. La conformación de asambleas que representen a varias asambleas municipales significaría extender la fuerza de la legitimidad y ejercicio de la representación colectiva hacia un nuevo sujeto, que sería la asamblea de asambleas, formada por acuerdo libre de municipios afines”, que incluso se podría concretizar en un “Congreso oaxaqueño comunalizado”. Maldonado Alvarado confía en que “en los próximos 25 años habrá una expansión importante de la comunalidad a través de estas y otras estructuras recuperadas por los pueblos mesoamericanos”.
El Topil 41: El poder de la comunalidad. 25 años de Usos y Costumbres en Oaxaca
