Con una movilización, el Pueblo Creyente de la Diócesis de San Cristóbal de Las Casas exigió que haya paz en la entidad y denunciaron que los pueblos mayas de Chiapas siguen enfrentando el abuso de poder, la falta de acceso a la justicia, represión y agresión en sus territorios.
Durante la peregrinación también conmemoraron el 13 aniversario de la muerte del obispo emérito jTatic Samuel y su año jubilar, y lanzaron consignas con las que pidieron un alto a la violencia, a las agresiones, a la venta de drogas y a la colusión de la delincuencia con los gobernantes.
„El Pueblo Creyente no ha dejado de organizarse, continúa con su trabajo en las comunidades para la defensa de la vida. Su fortaleza parte del análisis de la realidad de sus comunidades en donde se construye su historia“, afirma la organización de base ecclesial en su boletín.
Hacen un llamado a todos los pueblos de Chiapas para seguir construyendo la paz, a la sociedad civil nacional e internacional para que con sus acciones exijan el cese a las desapariciones, asesinatos y desplazamientos forzados de la población, así como la reconstrucción del tejido social.
En los últimos días, más de dos mil personas se vieron forzadas de dejar sus comunidades en los municipios de Chicomuselo, Socoltenango y La Concordia, en las zonas sierra y fronteriza de Chiapas, se encuentran desplazadas por la agudización de la violencia que se vive en sus regiones.
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