La comunidad ayuujk (mixe) de San Pedro y San Pablo Ayutla informó ayer que continua exigiendo la reconexión del sistema del agua potable de su manantial, que les fue despojado en 2017 por un grupo armado de la comunidad vecina de Tamazulápam junto con tierras donde vivieron más de veinte comuneras y comuneros: “Continuaremos exigiendo el cumplimiento de la sentencia dictada a favor de nuestra comunidad. Nada sustituye nuestra exigencia de reconexión a nuestro manantial”, afirman los quejosos del amparo interpuesto en 2017, en su boletín. Recuerdan que durante todo este tiempo “hemos reclamado por medios pacíficos pero de manera contundente y firme la terrible situación por la que nuestra comunidad ha atravesado estos más de tres años, situación que se ha agravado ahora por la situación de la pandemia de COVID-19. Nuestro pueblo ha sido sometido a una injusticia sostenida y a una violencia cotidiana derivada de la falta de acceso al vital liquido”. Exigen también que “los diversos delitos penales derivados de los ataques y las violencias que hemos sufrido no queden impunes”, entre ellas el despojo a mano armada de 23 personas de Ayutla de 150 hectáreas de parcelas colindantes con el manantial Jëënanyëj, el asesinato del comunero Luis Juan Guadalupe y el secuestro de cuatro mujeres. El pronunciamiento se publicó horas después de que el ulisista Héctor Pablo Ramírez Puga, actual titular de la Comisión Estatal del Agua, anunció que se construye un pozo profundo en Ayutla con el cual se busca dotarla de agua; obra cuestionada por activistas y defensores ya que no hay certeza de su éxito.
Boletín: Sobre la sentencia a favor del derecho al agua en Ayutla Mixe. Más información: “Nada sustituye la exigencia de reconexión a nuestro manantial”, asegura Ayutla Mixe. Leer también el reportaje: La Pandemia Intensifica la Lucha de las Mujeres por el Agua en Oaxaca, México. Contexto: Urge cumplir sentencia y reconectar el agua a Ayutla: Misión de Observación
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