Las enfermeras se han convertido en el símbolo de la lucha contra el Coronavirus

Las imágenes que llegan desde Bérgamo, la provincia italiana más afectada por el coronavirus, son demoledoras. Ayer por la noche una larga procesión de camiones del Ejército sacó de la ciudad setenta ataúdes que se acumulaban en el cementerio local, completamente desbordado por la emergencia. Son tantos los muertos que se han registrado en apenas una semana que las funerarias no dan abasto y los féretros se acumulan en los camposantos y en las iglesias, donde no puede oficiarse ningún tipo de ceremonia, tampoco los funerales. Los médicos y enfermeros sacan fuerza de donde no las hay para seguir atendiendo a los pacientes, que llegan graves a los hospitales. También ellos tienen miedo, y desde luego no son inmunes. En los últimos días, enfermeros de todo el mundo han querido mostrar cómo viven ellos la pandemia. Alessia Bonari y Elena Pagliarini son dos enfermeras que se han hecho famosas por contar su experiencia en sus respectivos hospitales italianos. Alessia Bonari describe su situación: “Soy enfermera y ahora mismo me enfrento a una emergencia sanitaria. También tengo miedo. (…) Los jóvenes no somos inmunes al coronavirus, nosotros también podemos enfermar. No puedo permitirme el lujo de volver a mi casa en cuarentena, tengo que hacer mi trabajo. Haz tu parte, te lo pido por favor”, finaliza. Elena Pagliarini, de 43 años, ha protagonizado otra de las imágenes más virales. En la foto, Elena aparece dormida sobre el teclado del ordenador, en su despacho en el hospital. Es otra de las realidades de los equipos sanitarios en estos días: la mayoría de ellos no van a casa, porque no pueden permitirse el lujo de descansar.