Un grupo de campesinos del Istmo de Tehuantepec busca aprovechar de forma sustentable el árbol del mezquite, considerado sagrado en esta región. Uno de los retos es que la población que habita la región de la selva baja donde crece este árbol no los tale con tal de meter especies incluidas en el programa Sembrando Vida, cuenta Pie de Página.
Mientras que en Argentina, mujeres defensoras ambientales de dos cooperativas nos muestran en un nuevo documental el cuidado del mezquite, la belleza de su territorio y nos narran sus luchas para defender la vida a partir del trabajo entre mujeres rurales: “Para nosotras, el algarrobo (o mezquite) es importante porque es recuperar la vida, recuperar esa biodiversidad que hemos perdido y que nos fue alejando del vínculo con la pachamama”.
Las vainas del mezquite se cosechan entre mayo y junio y la harina de mezquite “contiene mucha fibra y es libre de gluten, no contiene grasa, no contiene azúcar, pero sí es dulce por la péchita y aunque lo mezcles con otras harinas no le quita el sabor ni el dulce”, dice Cristina Felix, cocinera tradicional de la comunidad Seri de Comcáac .
“El árbol de mezqite es muy común de la zona tropical desértica y lo valoramos muy poco: provee un alimento sano, nutritivo y a la mano, sin necesidad de disponer del árbol”, explican activistas de Tierra del Sol, Oaxaca, en el documental “Harina de mezquite”, de la Red de Permacultura La Margarita.
Ver Guardianas del Territorio: Capitulo 1 “El Algarrobo” (13 min.) y Harina de mezquite o huizache: comida sana en tiempos del COVID-19 (8 min.). Reportaje: Zapotecas impulsan el rescate del mezquite, árbol sagrado en el Istmo. Leer también: Harina de mezquite: el superalimento de México con el que se hace pan tradicional libre de gluten