Hoy hace 12 años, el 15 de marzo de 2012, el defensor comunitario Bernardo Vásquez Sánchez, líder de la Coordinadora de los Pueblos Unidos del Valle de Ocotlán (COPUVO), fue asesinado en una emboscada en Santa Lucía Ocotlán, Oaxaca. En este ataque armado otras dos personas resultaron gravemente heridas.
La defensa del territorio en México es una actividad de alto riesgo por los altos niveles de impunidad y las agresiones a personas defensoras. Tal es el caso de la comunidad de San José del Progreso, Oaxaca, quienes desde 2009 se opusieron a la instalación del proyecto minero de explotación de plata y oro “San José”: la empresa minera Fortuna Silver Mines pudo imponerse a partir de la reprensión desde tiempos de Ulíses Ruíz Ortiz, la corrupción y el rompimiento del tejido social que derivó en los asesinatos de Bernardo Méndez y Bernardo Vásquez en enero y marzo de 2012, respectivamente.
Hasta 2024, dichos asesinatos continúan en la impunidad, sin embargo su importante labor de promoción y defensa de los derechos de los pueblos indígenas fue semilla para que comunidades de Valles Centrales se articulen para la defensa de su territorio. Aglutinadas en el Frente No a la Minería por un Futuro de Todas y Todos exigen con contundencia la cancelación del proyecto y concesiones mineras, además de evitar su expansión.
Educa se suma a la exigencia de las autoridades locales, municipales y agrarias y continúa exigiendo justicia por el asesinato de los defensores comunitarios de San José del Progreso.
Frente a la injusticia y el despojo, recuperación de la memoria histórica (EDUCA, 2022) | Informe Proyecto minero San José. Informe sobre violación de derechos humanos en comunidades de Ocotlán, Ejutla y Tlacolula. Oaxaca | Foto Jonathan Treat
