La semana pasada, 650 personas, algunos de ellos reconocidos intelectuales, firmaron un desplegado pagado en medios nacionales para exigir un alto a la polarización del país. El desplegado titulado “Esto tiene que parar”, donde los firmantes alertan que “el presidente de México atenta contra el periodismo libre y crítico”, fue la noticia central en los portales de los medios tradicionales. “Tienen algo de razón. Los abajofirmantes deben recordar que la división reclamada empezó en sus casas. Sí, esto tiene que parar: el odio, la violencia, su nostalgia por la sangre”, les responde Alberto Najar. Colaborador de BBC y presidente de la Red de Periodistas de a Pie. “Los abajofirmantes reclaman que el presidente de México promueve la división del país, fomenta la descalificación, el odio. Pero convenientemente olvidan mirar el espejo, y peor aún, simulan que no tienen historia. Muchos de los que respaldan el documento de marras son personajes que en los últimos años han sido fervientes promotores de la descalificación grosera, vil y discriminatoria de quienes apoyan al movimiento social del presidente López Obrador. El clasismo es su identidad. La discriminación, el sello vergonzante que presumen en privado”. En esta nueva lista de los “héroes de la democracia aparecen, claro, los damnificados de la lucha contra la corrupción”, remata Najar. En otra respuesta, titulada “Por la libertad, contra los privatizadores de la palabra” y promovida por por el cartonista Rafael Barajas “El Fisgón” y firmada por más de 28 mil personas, advierten que la “amplia y libre difusión” que alcanzó el desplegado del jueves pasado, “niega de manera contundente su principal aserto: que la libertad de expresión está ‘bajo asedio’.
Leer toda la reflexión de Alberto Najar: “Esto tiene que parar”: sí. Paren con su odio (y desfiguros). Leer también: Replican a 650 intelectuales: “quieren reinstaurar monólogo y a amos del análisis y la crítica”. Astillero: Frenados y desplegados. Cartón: LIBERTAD AMENAZADA–Fisgón
