En 2023, al menos 196 activistas fueron asesinados en todo el mundo por defender el derecho a la tierra y a un medio ambiente sano. América Latina sigue siendo el lugar con más asesinatos, con el 85% de todos los casos documentados en 2023, según la investigación de la ONG Global Witness, con sede en el Reino Unido.
Colombia fue el país que registró más violencia de este tipo, con 79 muertes y, a continuación, Brasil con 25. México bajó de 31 casos en 2022 a 18 casos de asesinatos o desapariciones forzadas de defensores registrados en 2023. “El número real de asesinatos probablemente sea mayor”, según la organización. Desde que comenzó el seguimiento en 2012, se han registrado 2.106 muertes de activistas.
“Los ataques letales suelen ir acompañados de represalias más amplias contra los defensores, que son objeto de violencia, intimidación, campañas de desprestigio y criminalización por parte de gobiernos, empresas y otros actores”, señala la ONG.
En Colombia, “muchas familias se han visto desproporcionadamente afectadas por disputas territoriales y violaciones de derechos humanos, exacerbadas por más de medio siglo de conflicto armado”, explica el informe, que destaca la plantación de coca y el tráfico de drogas como catalizadores de la violencia.
En México, los enfrentamientos por la industria minera parecen ser el telón de fondo de la mayoría de las muertes. De los 18 asesinatos, el 70% fueron de indígenas que estaban en contra de la expansión de las actividades mineras, afirma Global Witness.
Honduras, con 10 millones de habitantes y 18 asesinatos de defensores del medio ambiente y territorio, es el país con la tasa per cápita más alta de asesinatos de ambientalistas. Según el estudio, la presión sobre la selva tropical es la causa principal, debido a la expansión de actividades que van desde la agroindustria hasta el narcotráfico, lo que ha empeorado la situación.
Informe 2023 Voces silenciadas (Global Witness) | América Latina, la región más letal para ambientalistas (DW) | Antecedentes La Minuta “La eliminación de personas defensoras del ambiente y territorio busca instaurar el terror en una lucha”: Global Witness