La búsqueda de la justicia para muchas personas de pueblos indígenas se encuentra entre dos sistemas de tradiciones distintas, por un lado el sistema judicial del Estado Mexicano que abreva de la tradición positivista occidental y, por el otro, una diversidad de sistemas de impartición de justicia que aún practican muchas de las comunidades indígenas. Dado que ha sido muy reciente que se ha comenzado a hablar de pluralismo jurídico, el sistema de justicia estatal oprime otras tradiciones de hacer justicia a las que considera inválidas y primitivas.
Estas tensiones entre dos sistemas de justicia que se encuentran en asimetría estructural se hayan reflejadas en los escritos y en las ideas que diferentes mujeres indígenas han plasmado en los textos del presente número del proyecto Tzam. Muchas de ellas hablan de las diferencias entre los dos sistemas de justicia y también de los problemas que cada sistema plantea en el momento en el que las mujeres deciden denunciar las violencias que sufren.
“La justicia sin mujeres indígenas nunca será justicia para nuestros pueblos y la justicia para cada una de ellas se buscará siempre en comunidad”, afirma desinformémonos en la presentación de los textos de abril en su sección Tzam.
Decimoprimera semilla: Justicia