La madrugada del 11 de junio, el médico J. Carlos salió huyendo del hospital básico comunitario del municipio Villa de las Rosas. Al ver entrar a un grupo de personas armados con palos y piedras, que a su paso iba destruyendo el mobiliario del hospital que a la comunidad le costó una década de gestión, no le quedó más que refugiarse en la obscuridad de los pastizales cercanos a la carretera de entrada al pueblo. Tres horas quedó agazapado, hasta que los ánimos de la turba se calmaron. Buscó a sus compañeras de trabajo y salieron del poblado. A la fecha no es claro si la agresión al personal médico que se va repitiendo en una docena de municipios de Chiapas, es producto de lo que pareciera una campaña de desinformación nacida al calor de la incertidumbre ante la enfermedad del nuevo coronavirus, o hay algún otro motivo. También han ocurrido agresiones y amenazas al personal médico en los municipios de Las Margaritas, Totolapa, Ocosingo, Simojovel, Chilón, Comitán y Motozintla. Hay riesgo de nuevas agresiones a médicos y enfermeras en Oxchuc, San Cristóbal, Tenejapa y San Juan Chamula, explica María de Jesús Espinosa de los Santos, secretaria general de la Sección 50 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Secretaria de Salud (SNTSA). Este es el segundo problema que, en medio de la pandemia, enfrentan alrededor de 24 mil trabajadores de la salud que laboran en Chiapas. El primero y más importante, señala, es la falta de equipo de equipo de protección para atender a pacientes enfermos de COVID-19. El resultado es que 622 trabajadores de este sector han sido contagiados de COVID-19; de ellos, 10 han fallecido.
Hospitales colapsados y 622 trabajadores de la salud contagiados de COVID-19 y Chiapas, con déficit de médicos para atender la pandemia denuncia líder sindical
