La tradicional danza mixteca “los maromeros” ha sido parte fundamental de la historia, cultura y sobre todo un símbolo de fiesta para las comunidades de la nación Savi. Con los rostros pintados, vestidos de ropa colorida y pelucas, los maromeros se encargan de alegrar las fiestas con danzas, chistes y malabares con la finalidad de atraer risas y alegría.
Sin embargo esta tradicional danza, que para muchas comunidades mixtecas y serranas del estado de Oaxaca es considerado patrimonio cultural, actualmente se encuentra en peligro de extinción. La migración, la falta de empleo y la inseguridad son fenómenos sociales que han provocado la escasez de maromeros, “ahorita son pocos, pero antes eran más, muchos han emigrado. Varios muchachos aprendieron acá, pero como migraron dejaron de practicar el baile en la cuerda y se les olvidó y los que regresan ya no se integran”, dice un moromero perteneciente a un grupo de ocho jóvenes de Santa Rosa Caxtlahuaca que recientemente se han reunido, con el fin de continuar con la danza y enseñar a otros jóvenes de la comunidad.
Por ello hace varios años, se abrió la posibilidad de que las mujeres pudieran danzar y convertirse en maromeras en una danza donde tradicionalmente solo los hombres la practicaban. Yadira Mendoza de 17 años es la única y primera joven en convertirse en maromera en esa zona. “Soy la primera mujer que lo ha podido hacer y me siento muy orgullosa, esta danza es valiosa, y ya no lo practican mucho. Por eso invito a más mujeres a que se unan”, concluyó.
Se dice que “Maroma” proviene del árabe “mabruma”, que refiere a la cuerda vegetal, torcida o retorcida y dio nombre a la danza que se realiza en ella: la de maromeros, una danza que se ha transmitido de generación en generación y que implica muchas horas de ensayo disciplina y responsabilidad.
Reportaje en Desinformemonos Maromeros: Una danza tradicional que resiste desde la mixteca de Oaxaca Foto: Juana García
