El presidente ecuatoriano, Lenín Moreno, anunció anoche el traslado de su gobierno a la ciudad portuaria de Guayaquil y acusó a su antecesor Rafael Correa (2007-2017) y al mandatario venezolano, Nicolás Maduro, de desestabilizar a su gobierno, en momentos en que miles de campesinos comenzaron a llegar a Quito en medio de enfrentamientos con fuerzas militares, al aumentar la presión de las masivas protestas iniciadas el jueves pasado en rechazo a la eliminación del subsidio a combustibles. Jaime Vargas, presidente de la Confederación de Nacionalidades Indígenas de Ecuador (Conaie), que en 2000 impulsó el derrocamiento de Jamil Mahuad, cuestionado por su política económica, declaró que se espera que llegarán a Quito más de 20 mil indígenas. “Convocamos al paro del pueblo y la huelga nacional del 9 de octubre. Las acciones del pueblo no terminan allí si el gobierno no retrocede en las medidas”, manifestó Nelson Erazo, titular del Frente Popular, que reúne a grupos de trabajadores y estudiantes. Las protestas han dejado hasta el domingo un civil muerto, 73 heridos (incluidos 59 uniformados) y 477 detenidos, de acuerdo con cifras de las autoridades.
Leer la Declaratoria de agenda de lucha de organizaciones, pueblos, nacionalidades y comunidades indígenas amazónicas en apoyo a la movilización nacional y en ejercicio de nuestra autodeterminación. Ver la entrevista con pobladores de San Miguel del Común, que bloquearan una de las principales vías en Quito (6:31). Artículo de opinión: La rebelión de los zánganos, por Alberto Acosta y John Cajas-Guijarro. Contexto: Se extienden protestas en Ecuador, indígenas marchan hacia Quito. Gráfica: HispanTV
