La defensora Kenia Hernández sigue encarcelada desde hace más de un año como consecuencia de su trabajo como defensora de derechos humanos, y permanece en huelga de hambre desde el pasado 17 de octubre. Su caso es un “ejemplo crudo de la violencia de género institucional en México, usada como pedagogía del escarmiento a la protesta y particularmente castigada por ser una mujer que se atrevió a hablar y cuestionar de frente al Poder”, afirma el Centro de Derechos Humanos Zeferino Ladrillero. Además, “resulta necesario insistir que Kenia es mujer e indígena, características por las cuales el Estado ha recrudecido sus acciones contra ella”, reitera el Centro de Derechos Humanos “Fray Francisco de Vitoria OP. Kenia está en prisión preventiva en el penal federal de máxima seguridad número 16, en Morelos, desde el 25 de octubre de 2020, luego de haber sido acusada de siete cargos por delitos presuntamente cometidos en fechas y lugares distintos, cinco de los cuales aún siguen vigentes. Además de robo y robo con violencia (que son del ámbito local), la defensora fue acusada de obstruir las vías de comunicación, que corresponde al ámbito federal. Estas acusaciones estarían vinculadas con su actividad política a favor de las personas presas políticas, indígenas y mujeres, protestas que llevaba a cabo en las casetas. De acuerdo con las organizaciones que la acompañan, la salud de Kenia Hernández se encuentra delicada, con graves dolores de cabeza que no han sido atendidos por el personal médico del penal.
Permanece en huelga de hambre defensora Kenia Hernández y La dignidad inquebrantable de Kenia Hernández y el camino hacia la libertad. Ilustración: Haz Valer mi Libertad. Contexto: La activista amuzga Kenia Hernández cumple un año en prisión
